La crisis de los suministros está afectando, también, a la producción de vidrio mundial. No habíamos sido conscientes de esto hasta que un día nos saltaron especialmente las alarmas. Resulta que una marca de cerveza artesanal iba a empezar a producir en lata por primera vez ante la escasez de vidrio a la que se enfrentaba. Vamos, que iba a sustituir un material que, debidamente reciclado, puede tener vidas infinitas, es inocuo y altamente versátil; por otro que difícilmente se puede reciclar porque contiene varias capas de aluminio y plástico.

Nos quedamos perplejas y decidimos investigar más al respecto. Resulta que la producción de vidrio se está viendo afectada por esta crisis de recursos en la que nos encontramos. Falta material, las entregas se retrasan y cientos de productores se están viendo obligados a cambiar los envases de sus productos de formato o de material para no perder ventas. Esta situación se está dando desde antes de Navidad, aunque no ha sido ahora cuando estamos empezando a notar realmente la realidad y consecuencias de la misma.
La falta de materias primas y la subida de la luz han incrementado el precio del vidrio y cristal.
La producción de vidrio se está viendo seriamente perjudicada por dos motivos: el primero, por la inminente falta de materias primas. El vidrio y cristal se obtienen de la arena, y ésta es un material finito, como casi todos. La sobreexplotación y el mercado negro que hay detrás de su obtención están acabando con los recursos de arena. Entre los sectores que más la demandan no se encuentra la industria cristalera, son la construcción y el sector tecnológico. El segundo motivo que está afectando a la producción de vidrio y cristal es el aumento en el coste de la luz, imprescindible para la fabricación de este material.

Ojo, debemos hacer hincapié en que vidrio y cristal no son lo mismo, por eso no se puede echar una copa de cristal al contenedor del vidrio, que sólo debería contener envases. Esa es una buena forma de saber si lo que tenemos entre las manos es vidrio o cristal: ¿sirve para envasar algún producto, como una botella de vino o un tarro de legumbres? Si la respuesta es que sí, entonces el material es vidrio. El vidrio es reciclable, el cristal no lo es.
La solución: retornable y a granel. Es el momento de darle la vuelta a la situación.
¿Y en qué se traduce todo esto? En que el vidrio es hoy un 30% más caro que lo que era hace unos años. Evidentemente, eso se refleja también en la subida de los precios de los productos que compramos envasados en este material. Porque, por supuesto, cuando pagamos por un producto también pagamos por el envase que lo contiene, que tiene un valor por su cuenta. El caso del agua mineral es el único ejemplo por el que se paga exclusivamente por el envase, ya que las empresas son incapaces de producir agua mineral por sí mismas. ¿Te lo habías planteado alguna vez?
Para nosotras, esta crisis en realidad nos parece una buenísima oportunidad para incorporar nuevos hábitos a nuestras compras. La solución: reutilizar, reutilizar y reutilizar.
¡Se puede hacer! Lo primero ya está en nuestras manos. En Bizi Granel ofrecemos la posibilidad de que vengáis a hacer la compra con vuestros propios envases que os pesamos previamente en vacío para que paguéis sólo por el contenido del mismo. No pagas por el peso del envase o por el envase en sí.
Cuando se compra a granel sólo se utilizan los tarros de vidrio que ya tienes una y otra vez, y su final debería llegar cuando se nos rompiesen. En ese caso, reciclar y darle una nueva vida a ese vidrio no debería ser un inconveniente. El vidrio es uno de los materiales que más fácilmente pueden reciclarse y llegan a tener muchas vidas. Si no se puede comprar un producto a granel, como puede ser el caso de algunas bebidas, aceites y champús¹, por ejemplo, entonces lo mejor que puede hacerse es pasarse a los envases retornables.

Lo segundo, retornar los envases, ya no depende inmediatamente de nosotras, sino en las políticas de reciclado que estén implementadas. En países como Alemania se lleva haciendo años, muchos. Eso sí, sólo funciona con envases de bebidas. Estaría genial que lo ampliasen a todo tipo de alimentos.
Hay veces que si la normativa no lo facilita son las propias empresas las que lo pueden gestionar. Es lo que están haciendo algunas cerveceras de Bélgica ante esta crisis del vidrio: solicitan que se devuelvan las botellas para reutilizarlas después de una buena esterilización. En Bizi Granel nuestras botellas de leche son retornables gracias a que es el propio lechero el que viene todas las semanas a dejarnos las botellas llenas y llevarse las vacías. Nos gustaría que más envases de nuestros productos tuviesen la oportunidad de ser retornados, pero la logística y la distancia a veces juegan en contra.
Con un sistema de recogida de cascos vacíos a nivel estatal bien formulado, esos mismos envases podrían devolverse a las fábricas que los necesiten con mucha más facilidad y eficiencia. Cruzamos los deditos para que ese momento llegue más pronto que tarde. Ya hay propuestas a nivel estatal como la de Retorna o como la que se quiere implantar en la Comunidad Valenciana y que, parece, va a ser la primera en funcionar (aunque llevan desde 2017 dándole vueltas al asunto).
Mientras tanto, pequeños gestos cotidianos como reutilizar los botes que ya tenemos para comprar a granel y preparar nuestras propias conservas (embotar unos garbanzos es la cosa más simple del mundo) van a ir sumando cada vez más.
¿Conseguiremos anticiparnos a la futura crisis de recursos y adaptarnos antes de que las cadenas de producción se vean afectadas y, por lo tanto, nuestras compras? ¿Vendrá la adaptación después de vernos en la necesidad cuando notemos la carencia de recursos?
¹Hay productos que, por normativa, no se pueden vender a granel. Esta normativa se hizo para “proteger a los consumidores” y que no se pueda vender gato por liebre. Por ejemplo, que no se venda un aceite de oliva como virgen extra si el contenido del recipiente desde el que te sirves es otro. Esta normativa es la misma que ha acabado con las aceiteras y vinagreras que se solían poner en las mesas de bares y restaurantes y ha puesto en su lugar millones de envases monodosis de usar y tirar. Por esa regla de tres también puede ocurrir con los productos ecológicos como los que vendemos aquí. ¿Quién os dice que son eco? Pues nosotras, quién va a ser. La confianza en el lugar donde haces la compra debe ser absoluta.
Fuentes.
- OCU. 6 de mayo 2014. Recuerda: está prohibido rellenar aceiteras. https://www.ocu.org/alimentacion/alimentos/noticias/ojo-a-las-aceiteras
- La Vanguardia. 1 de febrero de 2022. Adiós a las copas y a las botellas, ¿se acabarán en 2050? https://www.lavanguardia.com/comer/tendencias/20220201/8024501/adios-copas-botellas-acabaran-2050.html
- Generalitat Valenciana. TECG- Comunicación de la implantación de un sistema, depósito, devolución y retorno (SDDR) de envases. https://www.gva.es/es/inicio/procedimientos?id_proc=3055&version=amp
- Comunidad ism. 24 de mayo de 2016. Valencia estudia poner un sistema de retorno de envases. https://www.comunidadism.es/actualidad/valencia-estudia-poner-un-sistema-de-retorno-de-envases/
- Retorna. Nuestra propuesta: el sistema de Retorno de envases. https://www.retorna.org/es/elsddr/propuesta.html